Pablo Zalaquett —retirado de la política electoral— se ha dedicado en exclusiva a las asesorías, la comunicación estratégica y los asuntos públicos. A fines de 2023, Ciper reveló que el exalcalde de Santiago prestó su casa para que ministros del Gobierno y empresarios acercaran posiciones, por fuera del marco regulatorio de la ley del Lobby.
Para el despliegue de sus asesorías, Zalaquett cuenta con dos sociedades: PZ Comunicaciones y Triangular Integración Estratégica SpA, empresa que comparte junto a su hermana, Mónica Zalaquett Said.
Es, justamente, Triangular Integración SpA, una de las firmas que la Contraloría, en su más reciente Informe 258/2024, identificó como una empresa que recibió pagos por servicios no materializados en proyectos mandatados por la Asociación de Municipalidades de la Zona Oriente (AMZO), compuesta por Las Condes, Vitacura y Lo Barnechea.
El organismo contralor detectó que la asociación contrató en mayo de 2017 a la empresa Triangular Integración Estratégica SpA, con el objetivo de desarrollar asesorías en torno a iniciativas urbanas de tipo cultural, como la creación de pasarelas y «plazas de bolsillo».
El contrato consideraba un pago mensual de $2 millones líquidos, con una duración de 12 meses. Sin embargo, fue terminado anticipadamente, en febrero de 2018, luego de que se pagaran solo $4 millones, correspondientes a los meses de diciembre de 2017 y enero de 2018.
Consultado por Fast Check CL en una entrevista exclusiva, Zalaquett cuenta otra versión de la historia: afirma que las gestiones las realizó para la Corporación Cultural de Las Condes y que no tuvo relación alguna con la AMZO. Explicó, además, que fue el propio Joaquín Lavín —en su periodo como alcalde entre 2016 y 2021— quien le solicitó colaboración para levantar fondos.

“Yo hablé con Joaquín Lavín y era solamente para Las Condes”
— ¿Puede contarme qué asesorías hacían en líneas generales?
En su momento, el alcalde Joaquín Lavín, en una conversación, me pidió a mi y a mi hermana, en un contrato que duró un año, apoyar el levantamiento de recursos para la acciones de la Corporación Cultural (de Las Condes). Ahí se le enviaban informes. Tuvimos reuniones con Entel, para levantar un fondo, apoyaron el festival de teatro, otros pusieron ambulancias. Teníamos un contrato por un año de $2 millones mensuales.
Tuvimos reunión con Larraín Vial y Clínica Las Condes. Con Clínica Las Condes fue partícipe del Festival de Cine y con Larraín Víal se hicieron unos temas culturales. La idea era levantar recursos con empresas de la comuna de Las Condes. Auspicios, apoyos, que podrían traducirse en servicios o eventos, que fueran partícipes para la gestión cultural de la comuna, dado que en ese minuto el alcance al mundo empresarial, que nosotros teníamos, era mucho mayor del que tenía la gente que estaba en la Corporación.
,— Esos insumos que ustedes reunían para el desarrollo de proyectos culturales, según Contraloría, no se concretaron. ¿Qué se hizo con lo que ustedes reunieron?
No, poh. La clínica puso, por ejemplo, una ambulancia. Después, la municipalidad se sumó a un encuentro cultural de una de estas empresas. Nosotros abríamos la puerta y dejábamos enlazados a los dos partes. Era yo o mi hermana los que teníamos que conectar a las empresas con la municipalidad. Nosotros hacíamos el nexo, la empresa mostraba interés, luego era la Corporación Cultural la que tenía que ir y ofrecerle todo el calendario de actividades sobre el cual participar.
Nuestro rol era buscar empresas de Las Condes, que estuvieran dispuestas a aportar a la gestión de la Corporación, ya sea auspiciando eventos de la cartelera o aportando servicios, que de otra forma hubieran significado un costo para la corporación y la municipalidad.
— ¿Las gestiones eran para la Corporación Cultural de Las Condes o para la Asociación de Municipalidades de la Zona Oriente (AMZO)?
Yo hablé con Joaquín Lavín y era solamente para Las Condes.
— ¿Le transparentaron que esto era para la AMZO?
No. Yo nunca me entendí con alguien de la asociación.
— ¿Siempre de la Corporación de Las Condes?
Sí, sí.
— ¿Y esa persona era Joaquín Lavín o era alguien más?
Con Joaquín conversamos, porque para él era un tema que la Corporación de Las Condes realizara el programa y faltaba auspicio. Ahí nos reunimos con un gerente que había en la Corporación. Nunca nos juntamos con la corporación de Vitacura, ni nadie más.
Yo no sabía, si me preguntas ahora, que la Corporación Cultural de Las Condes era parte de esto. Yo tenía entendido que tenían una corporación para los temas de seguridad. Entendía que hacían un festival de la chilenidad en conjunto.
— Lo que dice el informe de Contraloría es que fue a través de la asociación y no la corporación, donde se contrató a Triangular Integración Estratégica SpA. ¿No sabía que estaba trabajando para la AMZO?
Mira, si eso estaba incluído en el contrato, no me acuerdo. Si sé que él (Joaquín Lavín) me contactó y le dije «mira, aquí yo puedo ayudar». Pero, le dije «donde yo puedo ayudar es para la gestión de eventos culturales». Sé que las grandes empresas aportan. Yo te contacto a las grandes empresas, te abro las puertas, con una persona de programación, esa persona nos mandaba las distintas actividades que tenían planificadas para el año, yo hablaba con las empresas, les mandaba esto y luego estas empresas me decían «me interesa ver esto». Pero, con la Corporación de la Las Condes.
Nunca tuvimos relación con nadie de otro municipio. Ahora, si me dices por qué el contrato está firmado con otra agrupación, no tengo la menor idea, no me acuerdo. Quizás así había que hacerlo.
— ¿Le llama la atención que el contrato venía de la AMZO y no de la Corporación?
La verdad es que me pillaste, porque no me acordaba, siempre fue con la Corporación. Lo que pasa es cuando llegas a un acuerdo con alguien, te mandan un contrato y esa parte administrativa la ve mi contador. Se manda firmado y después se factura. Para serte franco, no sabía. Ahora me estoy enterando. Tengo muy claro la conversación, después nos juntamos mi hermana, Joaquín y yo, y esto quedó en manos de la relación ya de trabajo con el gerente o secretario general de la Corporación Cultural de Las Condes.
— Contraloría dice que la AMZO solo transfirió dos pagos, por dos millones cada uno. Un total de $4 millones.
No sé, es que no me acuerdo. Ni siquiera firmé el contrato. No llevaba la cuenta.
— ¿Los pagos fueron por todos los meses que trabajaron?
Es que cualquier cosa que tenga Contraloría es lo que es. Lo que salga ahí es lo que hay. Mi empresa no puede, y jamás lo haríamos, recibir un pago sin facturación. Lo que no me acuerdo es si es que fue un millón o dos meses mensuales. Es lo que hay (dice en relación al informe de Contraloría). Y para aclarar a rajatabla: aquí fue un trabajo concreto a una solicitud para poder ayudar una gestión comercial de auspicios para eventos de la Corporación Cultural de Las Condes. Yo no tomo clientes del sector público, solo del sector privado. Y, en este caso, es para ayudar la gestión de alguien.
— El contrato partió en mayo de 2017 y terminó en enero de 2018, ¿se le pagaron $4 millones por ocho meses de trabajo?
Es que pagaron lo que es (en referencia a lo que dice el informe de Contraloría). No me acuerdo mucho. Sé que el monto no era relevante, porque el objetivo era ayudar. Y, si nos hubiese ido mejor, podría haber seguido el contrato y no siguió, porque no había más interés por el tema cultural.
